por Mirena es conocido como el SIU (sistema intrauterino) que libera hormonas. Se trata de uno de los productos más innovadores en materia de anticoncepción al tratar de combinar en un solo sistema los beneficios de la anticoncepción hormonal y los dispositivos intrauterinos. Consta de una estructura de plástico pequeña y flexible en forma de T (longitud: 32 mm) que lleva en su brazo vertical un reservorio cilíndrico con una hormona similar a la progesterona, llamada levonorgestrel, muy utilizada en la anticoncepción oral. Una vez colocado dentro del útero libera pequeñas dosis hacia la cavidad uterina en forma continua durante 5 años.
Se encuentra indicado para anticoncepción, tratamiento de la menorragia idiopática (sangrado menstrual abundante) y prevención de la hiperplasia endometrial en la terapia de reemplazo estrogénico.El sistema liberador de hormonas (sistema de administración intrauterina de levonorgestrel) administra cantidades muy pequeñas de la hormona levonorgestrel directamente dentro del útero. Los efectos anticonceptivos y terapéuticos están basados principalmente en tres efectos locales en el útero: Moco cervical más espeso, Inhibición de la motilidad y función del esperma dentro del útero y las trompas de falopio, que previene la fertilización, Prevención del crecimiento endometrial. En su aspecto es muy parecido a un dispositivo intrauterino (DIU) tradicional, pero en el endoceptivo el cilindro de cobre presente en los DIU fue reemplazado por una cápsula que contiene 52 mg de la hormona levonorgestrel, que es liberada dentro de la cavidad uterina en pequeñas cantidades durante un período de 5 años y es en el útero, en forma local, donde ejerce su acción.
Es un método anticonceptivo altamente confiable. Su eficacia es comparable a la de la esterilización femenina aunque reversible y con la ventaja de ser fácil y conveniente de usar. Fue desarrollado para combinar los beneficios de los métodos anticonceptivos orales y los intrauterinos. A diferencia de los primeros, el uso del endoceptivo no requiere de una toma diaria. Además puede utilizarse en mujeres en período de lactancia. Además, también se indica para el tratamiento de la menorragia idiopática (sangrado menstrual abundante), pues produce una reducción del volumen de sangrado durante las menstruaciones (hasta de un 95% luego de un año), convirtiéndolo actualmente en la mejor alternativa terapéutica para estas pacientes; sin olvidar los beneficios adicionales asociados, como son la disminución de los dolores menstruales, evitar las anemias proporcionando al organismo un importante ahorro de hierro, etc.
Luego de la inserción del endoceptivo la capa interna del útero sufre un proceso de inactivación que se traduce en la reducción de la duración y el volumen del sangrado menstrual. A menudo el flujo escaso se convierte en espaciamiento o incluso ausencia de sangrado. Esto se debe a un efecto local, la función ovárica es normal y los niveles de estrógenos circulantes permanecen inalterados. Este proceso es totalmente reversible al extraer el endoceptivo y el sangrado menstrual normal reaparecerá dentro del primer mes después de que se retire el endoceptivo. También, es bueno aclarar que el endoceptivo no altera el curso de la fertilidad futura. Es necesario asegurar que en aquellas mujeres que usan el endoceptivo es muy poco probable que la ausencia de sangrado sea debido a un embarazo, aunque en caso de duda debe realizarse un test. También informar a las mujeres que la ausencia de sangrado no indica una anomalía hormonal.
La mujer con historia previa de embarazo ectópico (embarazo que ocurre por fuera del útero, generalmente en la trompa de falopio), de cirugía tubárica o de infección pélvica tiene un riesgo mayor de embarazo ectópico. Se debe considerar la posibilidad de un embarazo ectópico en el caso de dolor pélvico, especialmente en combinación con ausencia de menstruación, o si una mujer con ausencia del sangrado menstrual (amenorreica) comienza a sangrar. La tasa de embarazo ectópico en las usuarias del endoceptivo ha sido 0,1 por 100 mujeres/año, que es significativamente más baja que la estimada para las mujeres que no usan método anticonceptivo alguno: 0,3 – 0,5 por cada 100 mujeres/año.
En lo que respecta a las contraindicaciones del SIU Mirena, algunas de ellas pueden ser: infecciones ginecológicas, hemorragia uterina anormal no diagnosticada, displasia cervical, algunos cánceres ginecológicos u otros tumores dependientes de los progestágenos, anomalías congénitas del útero o del cuello del útero. El de la falta de estudios que prueben que no aumenta el riesgo de cáncer de mama, es uno de los principales argumentos que tienen importantes expertos en oncología. Cinco años liberando una hormona que incide en este tumor no es algo para tomar a la ligera. Por otra parte, a muchos médicos no les convence el hecho que una mujer esté 5 años sin menstruar, porque no se puede saber si está embarazada o si hay otro problema. De todos modos, todos los anticonceptivos -ya sean pastillas con combinacion de hormonas o dispositivos con hormonas- están contraindicados en la mujer que fue tratada o tiene cáncer de mama.
Lo primero que dicen la mayoría de los médicos es que “es caro pero el mejor” y que cuesta entre 5 mil y 6 mil pesos. Y algunos hasta lo cobran en dólares. Muchos dicen que “ese es el valor y que no ganan nada en el medio pero, no es cierto: a los médicos les cuesta menos de $ 2.500 , y lo cobran alrededor de $ 6.500. Es por eso que el laboratorio que lo elabora, BAYER, decidió comenzar a venderlo en algunas farmacias. Su valor es de aproxi. $3.000 y es necesario verificar con cada prepaga para ver si lo cubre o no. Cabe aclarar que a estos costos hay que sumarle los materiales que se utilizan para su inserción (incluyendo aquellos descartables) y los honorarios médicos.
