26 de abril de 2024

Sangrado vaginal en el embarazo

Es fundamental que toda mujer sepa que es imposible estar embarazada y al mismo tiempo, tener la menstruación.

Durante la primera fase de la gestación es posible que algunas mujeres sufran un sangrado similar al del período menstrual. Generalmente, esto se conoce con el nombre de sangrado precoz del embarazo. El sangrado puede variar en cantidades, desde pequeñas manchas hasta sangrado vaginal consistente.

Es un fenómeno que se debe a los cambios hormonales, aunque las cantidades de sangre suelen ser diferentes a las que una mujer sufre cuando tiene su período menstrual normal. Algunas mujeres pueden confundir esto con la regla porque, a menudo, aparece justo cuando estaban esperando la llegada del ciclo menstrual. La hemorragia o manchado irregular que ocurre durante el embarazo suele ser de color marrón oscuro o rosado claro. En ningún caso, debe haber suficiente sangrado para llenar toallas femeninas o tampones durante unos días.

Sangrado vaginal en el embarazo

Algunas causas que pueden provocar episodios de sangrado durante el embarazo:

Cambios hormonales

Una razón por la que una mujer puede sangrar estando embarazada, es por el nivel de progesterona. Cuando estás embarazada, la progesterona aumenta lo suficiente como para suprimir el período menstrual. Sin embargo, en algunos casos, es posible que esta hormona sexual no se eleve lo suficiente como para suprimir el ciclo por completo, especialmente durante las primeras etapas del embarazo. Por este motivo, entonces, ocurre el sangrado.

Sangrado después del control de la natalidad

A veces, las mujeres tienen ciclos irregulares después de tomar la píldora anticonceptiva. Si se ha dejado de tomar recientemente y la mujer está embarazada, es posible que sufra manchas intermitentes debido a los cambios hormonales. Quedar embarazada poco después de dejar de tomar las pastillas anticonceptivas también contribuye a dificultar la diferenciación del sangrado intermitente del correspondiente a un período real.

Sangrado o manchado de implantación

Ocurre cuando el óvulo fecundado se adhiere al revestimiento del útero. A medida que el óvulo penetra en el revestimiento, provoca que parte de este se desprenda. Generalmente, este tipo de sangrado es de color marrón claro, rosado o rojo.

Embarazo molar

El embarazo molar sucede cuando el óvulo fertilizado crece anormalmente y la placenta se convierte en una masa de quistes, como un tumor benigno. Se caracteriza por el crecimiento anormal de trofoblastos, las células que normalmente se convierten en la placenta. Sin embargo, desafortunadamente, esto puede provocar que en algunas ocasiones el embarazo no sea viable. Sin ninguna duda, se trata de otra situación en la que se necesita atención médica inmediata para evitar daños al sistema reproductivo.

Embarazo ectópico

A veces, el óvulo fertilizado puede implantarse en otro lugar que no sea en el útero. Esto ocurre normalmente en las trompas de Falopio o el cuello uterino. Cuando sucede, las células comienzan a crecer y, en consecuencia, causan dolor y sangrado. Este probablemente será de color rojo y, en ocasiones, muy doloroso. Si no se trata, esta situación puede dañar las probabilidades de embarazo en el futuro; por eso, es muy importante recibir asistencia médica de inmediato.

Aborto espontáneo

El sangrado también puede ser un signo temprano de aborto involuntario. Al igual que las otras causas de sangrado durante el embarazo, un aborto espontáneo a menudo comienza con manchas ligeras que se convierten en sangrado abundante. Además, se debe tener en cuenta que la pérdida de sangre durante el embarazo no siempre significa que la mujer no vaya a tener un embarazo saludable o un aborto, aunque sí debe ser motivo de preocupación. Por lo tanto, si existe sangrado y una se encuentra embarazada, hay que consultar al médico de manera inmediata.