20 de abril de 2024

¿Cuántas horas debe dormir tu hijo de acuerdo a su edad?

La calidad y horas de sueño de nuestros hijos es uno de los temas que más nos preocupan (u ocupan) como papás. Da igual la edad que tengan, ya que todos sabemos lo imporante que es dormir bien para su desarrollo físico, mental y emocional.

Cuando son bebés “noctámbulos”, mas que preocupados, estamos casi desesperados porque aprendan a dormir seguido de noche, por su salud y por la nuestra. Pero, según van creciendo, nuestra preocupación se va centrando en si son compatibles los horarios y el estilo de vida que llevamos, con un sueño suficiente y de calidad.

Dormir profundamente nutre la vida. La salud se ve seriamente beneficiada cuando logramos un buen descanso. Dormir menos horas de las que debemos influye notable e indiscutiblemente en nuestro bienestar, y los riesgos para la salud se multiplican cuando esto se produce de manera habitual.

Niños que no duermen suficiente pueden sufrir:

  • Irriabilidad
  • Depresión
  • Ansiedad
  • Menor capacidad de concentración
  • Mayor riesgo de accidentes y caídas, entre otros problemas.

A largo plazo y en casos de falta de sueño crónica, tienen mayor riesgo a padecer:

  • Obesidad
  • Diabetes
  • Enfermedades cardiovasculares
  • Mayor incidencia de infecciones por tener las defensas más bajas

Es complicado concretar cuánto tiempo necesita cada chico, porque depende de su actividad a lo largo del día, más que de su edad u otros factores. El tiempo ideal de sueño para una persona es aquel que le permita hacer las actividades diarias con normalidad.

¿Qué hacer si tu hijo se resiste a dormir a la noche?

Hay chicos que se rebelan pacíficamene a la hora de dormirse y parece imposible lograr que cierren los ojos. Es la clásica “batalla” para irse a la cama.

Algunos consejos que pueden funcionar:

  • Fijar una hora en la que deben dormirse y que ésa sea respetada. Marcar una hora objetivo, ayuda a ajustar las rutinas al tiempo disponible.
  • Manejo de rutinas repetitivas: lavado de dientes, un cuento, y a la cama.
  • Nada de preguntas. Muchas veces caemos en el error de hacerles preguntas tipo “no estás cansado?” “¿Vamos ya a la cama?”. La hora de dormir no debe ser negociable (salvo contadas excepciones).
  • Nada de uilizar pantallas dentro de la habitación al momento de irse a dormir. Tablets, Ipads, celulares, TV, la playstation, etc… suelen ser estimulantes y son una mala idea. Serán más difícil que puedan conciliar el sueño, aún metidos en sus camas.
  • Vida activa pero sin pasarse de rosca. El hacer actividad física esimula a un buen descanso pero cuando se exceden, el efecto suele ser el contrario. Es imporante contar con tiempos de relajación y descanso.
  • Cena ligera. Y lo aconsejable es que la misma sea unas 2 horas antes de acostarse.