24 de abril de 2024

Dormir la siesta al aire libre tiene beneficios para los bebés

Son varios los estudios que se han realizado y demostrado que las siestas al aire libre traen múltiples beneficios a los bebés.

Para empezar, los chiquitos logran descansar de una manera más serena, prolongada y profunda. A los bebés les agrada porque las mismas no son digiadas por sus padres. Es decir, ellos no deciden cuándo y cómo debe dormir su hijo sino que es el propio bebé quien lo hace. El entorno los invita a relajarse y dormir.  Cuando las madres van a un parque o una plaza y, dejan a su bebé dormitar en el cochecito mientras ellas trabajan al lado, los niños descansan más profundamente y durante más tiempo que cuando duermen en el interior de la vivienda; en concreto hasta 90 minutos más.

El estudio analizó muchas rutinas de los bebés finlandeses y sus horarios de sueño, tanto cuando duermen dentro de casa como cuando lo hacen en el exterior. Los padres nórdicos aseguran que cuando sus hijos duermen en la intemperie se enferman menos que cuando lo hacen dentro de casa.

Es por ello que, ésta práctica de dormir a los bebés en el exterior también se conoce como siesta nórdica.

Los beneficios de dormir al aire libre no sólo se extienden a la salud, el hecho de que los bebés duerman siestas más largas al estar en el exterior les ayuda en su desarrollo y aporta beneficios a medio plazo. Los bebés que duermen al aire libre comen mejor, tienen mejor estado anímico y aprenden más rápido. Y aunque no sea exclusivamente durmiendo, se ha visto que los niños que pasan más tiempo en el exterior (jugando, haciendo deporte, paseando…) tienen mayor capacidad de concentración que los que están en el interior de las casas.

Como beneficio colateral tenemos que el hecho de que las siestas más largas de sus hijos afectan positivamente a su carácter, permitiendo a su vez a los padres relajarse, despejarse y tener más tiempo para ellos mismos. Es una costumbre deseable cuando promueve el bienestar de la familia, aunque lógicamente, las necesidades del niño y su seguridad siempre deben ser lo primero.

Probar no cuesta nada, sobre todo porque no sólo nuestro bebé puede ir con nosotros a la calle, sino que los papás pueden aprovechar ese tiempo también para descansar y ejercitarse, ya sea que llevemos al bebé en una mochila conra nuestro pecho o bien en su cochecito.