20 de abril de 2024

¿Qué es la hiperprolactinemia?

La prolactina es una hormona liberada por la hipófisis o glándula pituitaria que tiene como funciones principales intervenir en las situaciones de estrés y estimular la producción de leche durante el embarazo y la lactancia materna.

La hiperprolactinemia sucede cuando los niveles de hormona prolactina se sitúan por encima de los niveles normales. La prolactina alta puede llevar, en muchas ocasiones, a la infertilidad. Un desajuste hormonal puede causar alteraciones menstruales que puede complicar que un embarazo ocurra.

La estimulación del pezón bloquea la segregación de dopamina, la cual inhibe la prolactina. Por ello, la disminución de dopamina produce un bloqueo de la inhibición, lo que hace que aumente la concentración de prolactina en sangre. Esto se conoce como control negativo, donde la dopamina es baja y la prolactina alta. Al momento de que la lactancia se detiene, ocurre un descenso del nivel de prolactina. En el embarazo, la prolactina aumenta, debido a que tiene el objetivo de preparar a la mujer para la producción de leche. En este etapa ocurren diversos cambios hormonales, donde se destaca el aumento del estrógeno, lo que hace que también se eleve el nivel de prolactina.

Cuando la prolactina es alta, la secreción de la hormona liberadora de gonadotropina, se detiene. Esto ocasiona qu disminuya la liberación de las gonadotropinas LH (hormona luteinizante) y FSH (hormona folioculoestimulante). Al momento de que disminuye la acción de estas hormonas sobre el ovario, se impide el desarrollo ovocitario y la ovulación. Debido a esto, durante el embarazo la mujer se encuentra en un estado de infertilidad pasajera causado por la hiperprolactinemia.

Además del embarazo y la lactancia, también existen otros motivos para que aumente la prolactina:

  • Pastillas anticonceptivas de estrógenos.
  • Tumor benigno como el prolactinoma.
  • Orgasmo.
  • Mucho estrés.
  • Sueño profundo.
  • Demasiado ejercicio físico.
  • Drogas neorulépticas, antidepresivos, ansiolíticos, entre otros.
  • Hipotiroidismo, hiperandrogenismo, anorexia nerviosa, bulimia, insuficiencia renal crónica, entre otras.
  • Estimulación de la mama.

Existen diversos síntomas que pueden indicar que existe un aumento de la prolactina:

  • Irregularidades menstruales y alteración de la ovulación.
  • Dolores de cabeza.
  • Visión borrosa u otras alteraciones de la vista.
  • Osteoporosis.
  • Disminución de la libido.
  • Sequedad vaginal.
  • Infertilidad.
  • Galactorrea.
  • Aumento de peso.

Es importante recordar que no es necesario que presentes todos los síntomas, únicamente con tener algunos puede existir la presencia de hiperprolactinemia.

Si existe una sospecha de hiperprolactinemia, se debe realizar un análisis de sangre para determinar si el nivel de prolactina es más elevado de lo que debería. Es importante realizar el examen en reposo, en horas de la mañana y evitando cualquier situación de estrés que pueda aumentar la prolactina. El nivel adecuado de prolactina debe ser inferior a 20-25 ng/ml. Si el examen tiene como resultado entre 20 ng/ml y 40 ng/ml se debe repetir antes de determinar que la paciente sufre de hiperprolactinemia. Es muy importante estudiar por qué la prolactina es alta, analizar los síntomas que se presentan, los fármacos que toma la paciente y la relación de otras patologías que puedan ser causa de hiperprolactinemia.

Si la hiperprolactinemia es causada por estrés o la administración de una sustancia tóxica, únicamente basta con eliminar el foco causante del aumento de la prolactina. En caso de que sea causada por otra patología como el hipotiroidismo, el tratamiento será enfocado en esa enfermedad. Otros tratamientos se basan en fármacos agonistas de la dopaminaEstos ejercen la función de la dopamina, inhiben la prolactina, dismuniyendo su nivel en la sangre. Estando la prolactina en un nivel normal, se recuperan los niveles de otras hormonas como la FSH y la LH.